Síntomas habituales de infección urinaria

Las infecciones urinarias son responsables de más de 8.1 millones de consultas médicas y cientos de millones de gastos anuales. En promedio, el 50% de las mujeres y el 12% de los hombres presentarán infección urinaria.

Las infecciones urinarias generalmente aparecen con fiebre. Sin embargo, entre un 30% y 40% de las personas de edad avanzada no presentan fiebre junto con esta infección tan habitual, por lo que resulta difícil de detectar. Se enumeran a continuación otros síntomas comunes de infección urinaria:

Orinar con mayor frecuencia

Sentir dolor al orinar

Sensibilidad al tacto en la zona abdominal inferior

Muecas o gestos de dolor al orinar

Orina de aspecto lechoso, turbio o de color rojizo/rosado

Estado de confusión repentino, no habitual en la persona

El riesgo de infección urinaria aumenta a medida que la incontinencia empeora. La forma natural del organismo de evitar las infecciones urinarias es mediante el vaciado de la vejiga. A medida que la orina se desplaza a través del sistema urinario se eliminan las bacterias del organismo. Las personas de edad avanzada presentan mayor riesgo de infecciones urinarias porque a medida que envejecemos, nuestra vejiga pierde elasticidad y los riñones pierden la capacidad de filtrado de los residuos. Puede producirse la retención de orina, cuando pequeñas cantidades de orina permanecen en la vejiga después del vaciado, aumentando la posibilidad de una infección urinaria. Otras patologías como la hipertensión, las cardiopatías, la diabetes y el cáncer aumentan el riesgo de infección urinaria.

Prevención y cuidados de la infección urinaria

Es muy importante intentar reducir los riesgos. He aquí algunas recomendaciones:

Consumir una cantidad adecuada de líquidos (6-8 vasos de 8oz por día).

Incluir hasta 3 vasos de 8oz por día de jugo de arándanos (no cóctel de arándanos, la etiqueta debe decir 100% jugo natural).

Evitar el consumo de sustancias irritantes de la vejiga, como alcohol, cafeína, picantes y cítricos.

Si usa pañales para adultos, ropa interior descartable, o toallas higiénicas para el control urinario, cambie los productos absorbentes inmediatamente después de ensuciarlos o mojarlos, lo que le permitirá reducir no solamente el riesgo de infección urinaria sino también la erosión cutánea u otras lesiones en la piel.

Vaya al baño después de haber sufrido un episodio de incontinencia en una toalla higiénica, pañal o prenda interior descartable, para vaciar el resto de orina de su vejiga. Asegúrese de vaciarla por completo. Los restos de orina en la vejiga pueden ser un caldo de cultivo para las bacterias.

Realice una limpieza adecuada de la zona genital después de cada episodio de incontinencia o después de ir al baño.

Realice la limpieza genital de adelante hacia atrás usando agua tibia o toallitas de limpieza hipoalergénicas y sin perfume. ¡No frote!

Lávese las manos antes y después de cada episodio de incontinencia o cada vez que vaya al baño.

Elabore un plan de visitas al baño que le permita ir varias veces durante el día y minimizar la cantidad de episodios de incontinencia.

Este artículo tiene fines educativos solamente y no reemplaza el consejo del médico. Si tiene dudas o inquietudes con respecto a los síntomas de infección urinaria propia o de un ser querido, comuníquese con su médico de cabecera.

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Este artículo fue escrito por un colaborador de Shield HealthCare.

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